lunes, 4 de febrero de 2019

#A175 Transformados

Serie : Una Vida de Oración
#A175 Transformados

Pastor Jorge Macías Benítez
3 de Febrero, 2019



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Introducción

Queridos lectores, familia natural y de la Fe, a todo buscador de Amor, de Verdad, de Paz y de Esperanza, a todos quienes escuchan, leen y/ó ven la publicación de los Mensajes que por Gracia de Dios, Él Ministra por medio de este Hijo Suyo que les habla y escribe, ¡Bienvenidos a esta que es casa de Dios y de Su Reino, Reino de Dios Ministerios!
¡Buenos días!
Soy el Pastor Jorge Macías Benítez, su hermano e Hijo de Dios; también de corazón te tiendo la mano, te abro el corazón y te quiero recibir, dar un abrazo…¡¡¡¡en el Amor del Señor…!!!!
Esta mañana del domingo 3 de Febrero del año 2019, el título del Mensaje es :
Transformados

Fundamento
“El hombre bueno dice cosas buenas porque el bien está en su corazón, y el hombre malo dice cosas malas porque el mal está en su corazón. Pues de lo que abunda en su corazón habla su boca.”
Lucas 6:45
Amados en Cristo, queridos amigos, la esposa y su esposo dicen cosas que salen del corazón.
Si experimentamos la dulzura del amor, las palabras son dulces como el primer beso; si se experimenta amargura, las palabras son lanzas y anzuelos que causan dolor.
Sabes, el problema no es lo que decimos, sino el porqué lo decimos, esto es, que lo origina.

Oremos

Inicio
Amados en Cristo, queridos amigos, las palabras siempre reflejan lo que llevamos dentro.
Es común - tristemente -  que sin saber por qué, nos pasemos los días dejando en el camino amargura a diestra y siniestra.
Pronunciando dolor, caiga quien caiga; aún resoplando daño de sol a sol.
Sin saber que es nuestro corazón herido por los años, nuestro interior bañado en el descontento y los pecados del alma, su única razón.
Nuestra pareja y claro, nuestra familia y cercanos, aún la gente que se cruza en nuestro camino — simplemente por el hecho de compartir con nosotros el tiempo y el espacio — termina pagando una cuenta que no debe.
Ahora, para decir con el alma “te amo”, hay que sanar por dentro.
Para decir de corazón que “te amo”, es necesario arrancar la amargura del alma.
Solo así podremos amar de verdad, expresando lo que sentimos de corazón, con dulces palabras, todo el tiempo; pronunciando bendiciones, diciendo frases cariñosas, sacando amor de la abundancia de nuestro corazón…¡¡¡Hallelujah..!!!
Amados, nos debemos a nosotros mismos — y a Dios — la deuda del amor; nos es necesario preparar el corazón para amar.
La Palabra de Dios nos invita a acercarnos a Dios y traerle a Él las heridas de la infancia, las experiencias pasadas, la amargura adquirida con los años; pedirle que nos permita tener un corazón nuevo para estrenarlo con la persona a quien hemos prometido amar todos nuestros días.
Dios es Amor y es a través de permitirle que Edifique una Relación con Él y con Fundamento en Su Palabra como aprendemos a Amar.
¿Que nos dice la Palabra de Dios para sanar tu corazón herido? :
  1. Ezequiel 36:26
“Pondré en ustedes un corazón nuevo y un espíritu nuevo. Quitaré de ustedes ese corazón duro como la piedra y les pondré un corazón dócil.”

  1. Salmos 147:3

“Él sana a los que tienen roto el corazón, y les venda las heridas.”

Un Corazón Nuevo

Amados…¡vaya promesa de Dios...ha..!

¡Te dice que pondrá un corazón nuevo!

Ahora…¿cuál es el contexto previo que Ezequiel, Profeta de Dios, Lleno del Espíritu Santo manifiesta?

Dios está hablando con precisión, versículos previos y ahí mismo en Ezequiel 36 :

“21 Pero he tenido dolor al ver mi santo nombre profanado por la casa de Israel entre las naciones adonde fueron. 22 Por tanto, di a la casa de Israel: Así ha dicho Jehová el Señor: No lo hago por vosotros, oh casa de Israel, sino por causa de mi santo nombre, el cual profanasteis vosotros entre las naciones adonde habéis llegado.”

¿No te parece Asombroso?

Me explico.

En la naturaleza del hombre, si éste - cualquiera de nosotros - es deshonrado, ofendido, vilipendiado, profanado y peor aún, ocurre por personas cercanas a tí, quizá tu propia familia, lo que nos sucede es que nos sentimos lastimados, enojados.

Luego entonces, actuamos seguramente en consecuencia, rompiendo relaciones, alejándonos, esto es, castigando al agresor y ofensor.

En cambio, ¿qué hace Dios?

Te dice :

“Pondré en ustedes un corazón nuevo y un espíritu nuevo. Quitaré de ustedes ese corazón duro como la piedra y les pondré un corazón dócil.”

¡Asombroso!

Si, Dios no es como tu y como yo.

Su Estrategia resulta ser una en la cual en lugar de ofender, ¡nos cambia!

¡Hallelujah!

Ahora, Amados en cristo, queridos amigos…¿cómo es que Dios cambia nuestro corazón para darnos un corazón nuevo…?

Una Relación Personal

Amados en Cristo, queridos amigos, la fe cristiana no es una religión, es una relación personal con Dios.  

La religión no puede y nunca ha podido transformar vidas; solo Cristo puede cambiar totalmente una vida, y la manera que lo hace es primero cambiando el corazón.

En completo contraste a la religión, que trata de reformar al ser humano, la vida cristiana es una transformación de adentro hacia fuera.

La Palabra de dios nos dice en 1a. Samuel 9 : 15-17…

“15 Y un día antes que Saúl viniese, Jehová había revelado al oído de Samuel, diciendo: 16 Mañana a esta misma hora yo enviaré a ti un varón de la tierra de Benjamín, al cual ungirás por príncipe sobre mi pueblo Israel, y salvará a mi pueblo de mano de los filisteos; porque yo he mirado a mi pueblo, por cuanto su clamor ha llegado hasta mí. 17 Y luego que Samuel vio a Saúl, Jehová le dijo: He aquí éste es el varón del cual te hablé; éste gobernará a mi pueblo.”

Vemos en la Palabra de Dios - además - que :

“Aconteció luego, que al volver él la espalda para apartarse de Samuel, le mudó Dios su corazón; y todas estas señales acontecieron en aquel día.” 1a. Samuel 10 : 9

Amados, el apóstol Pablo escribió :

“De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.”
2a. Corintios 5:17  

Si hubo alguien en la Biblia que experimentó una completa transformación en su vida, fue el apóstol Pablo, conocido antes de ser salvo como Saulo, el perseguidor de la Iglesia…

Dice la Palabra de Dios en Hechos 9 : 17-21,

“Fue entonces Ananías y entró en la casa, y poniendo sobre él las manos, dijo: Hermano Saulo, el Señor Jesús, que se te apareció en el camino por donde venías, me ha enviado para que recibas la vista y seas lleno del Espíritu Santo.  Y al momento le cayeron de los ojos como escamas, y recibió al instante la vista; y levantándose fue bautizado. Y habiendo tomado alimento, recobró fuerzas. Y estuvo Saulo por algunos días con los discípulos que estaban en Damasco. En seguida predicaba a Cristo en las sinagogas, diciendo que éste era el Hijo de Dios.  Y todos los que le oían estaban atónitos, y decían: ¿No es este el que asolaba en Jerusalén a los que invocaban este nombre, y a eso vino acá, para llevarlos presos ante los principales sacerdotes?”

¡La respuesta a esa pregunta era claramente “no”, ya no era el mismo hombre, había nacido de nuevo!

Amados...el hombre solo puede mirar lo que está por fuera, pero Dios mira el corazón; así nos lo dice en 1a. Samuel 16:7.

Dios lo que quiere es nuestro corazón. Proverbios 23:26 dice :

“Dame, hijo mío, tu corazón, y miren tus ojos por mis caminos.”  

Si cambia nuestro corazón, también cambiará nuestra vida.  

Proverbios 4:23 dice :

“Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida.”

En otras palabras, si queremos que las cosas cambien – nuestra vida, nuestro matrimonio, nuestra familia, nuestras circunstancias, nuestro comportamiento – nuestra manera de pensar, hablar y actuar – primero nuestro corazón debe cambiar, y el único que puede cambiar el corazón es Cristo.

En Apocalipsis 3:20 dice la Palabra de Dios :
“He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él,…”

Amados en Cristo, queridos amigos, ¡Cristo SIEMPRE está tocando a la puerta de tu corazón!

Ahora...  ¿Estarás dispuesto a abrirle tu corazón y dejar que Él entre?  

Escucha, Él es el único que puede transformar tu vida, aunque solo lo hará si tu le entregas tu corazón primero.

Amados, lo que más debemos de cuidar (guardar) es nuestro corazón.  

Si te encuentras “estancado” en tu crecimiento espiritual, en tu servicio al Señor,  si has dejado de llevar fruto como antes, lo que necesita hacer es dejar que el Señor obre en tu corazón nuevamente.  

Dice la Palabra de Dios en Hebreos 3 : 7-8 ...

“Por lo cual, como dice el Espíritu Santo: Si oyereis hoy su voz, No endurezcáis vuestros corazones,…”

Dios cambia tu Corazón

“Entonces el Espíritu de Jehová vendrá sobre ti con poder, y profetizarás con ellos, y serás mudado en otro hombre. Y cuando te hayan sucedido estas señales, haz lo que te viniere a la mano, porque Dios está contigo. Luego bajarás delante de mí a Gilgal; entonces descenderé yo a ti para ofrecer holocaustos y sacrificar ofrendas de paz. Espera siete días, hasta que yo venga a ti y te enseñe lo que has de hacer. Aconteció luego, que al volver él la espalda para apartarse de Samuel, le mudó Dios su corazón; y todas estas señales acontecieron en aquel día.”  
1a. Samuel 10:6-9

En los versículos anteriores, el profeta Samuel le advierte a Saúl unos acontecimientos que se darían como Señal de que Dios estaba con él.  

En el verso 6 de 1a. Samuel 10, se le profetiza a Saúl que el Espíritu de Jehová vendría sobre él con Poder, y profetizaría junto con los profetas, y sería mudado en otro hombre.  

Pero luego, en el verso ocho, el profeta le dice a Saúl que tiene que esperar por él, porque este le enseñaría lo que tenía que hacer.

Amados en cristo, queridos amigos :

“Hay personas que han sido llamados para algo, aunque aún no se han convertido en la persona que tienen que ser para poder hacerlo”.  

Escucha, el hecho de que Dios te haya mandado a hacer algo, no significa que tú sepas cómo hacerlo.

Tú puedes tener una Posición, y no ser capaz de manejarla.  
La gente puede pensar que en el versículo 9 ocurrió lo que Dios dijo en el verso 6, pero hay una gran diferencia entre ambos versos :

Primeramente, Dios dice que haría de Saúl un hombre nuevo; en el verso nueve, dice que lo que mudó fue el corazón.
La expresión de “mudar el corazón” significa que se prepara para nuevas experiencias.

El ser “mudado en otro hombre” es la experiencia que Dios nos promete en su Palabra.  

Él nos dice que seremos nuevos en Cristo Jesús, y tú necesitas ser nuevo para ser todo lo que Dios quiere que tú seas.  

Escucha y Recibe en el Nombre de Jesús…:

“Para ser Transformados en las personas que Dios quiere que seamos, necesitamos mudar el corazón, porque si el corazón no despierta, no podemos ver todas las señales para alcanzar la transformación.”

Si tu corazón despierta, entonces puedes ver todas las cosas que Dios está haciendo contigo para acercarte a ser la persona que debes ser.  

Pero eso es solo el inicio; por ello hay mucha gente cristiana que su corazón se despertó, pero no han llegado a transformarse completamente.  

El problema es que la gente no quiere ser cambiada :
“Las personas quieren todas las cosas grandes, haciendo lo mismo de siempre”
Pastor Jorge Macías Benítez

Necesitarás gente que te ayude dentro de todo ese proceso, porque una cosa es lo que puedas tener y otra es lo que puedas hacer.   

Amados...el Poder del Espíritu Santo para tu vida, más que para hacer, es para que seas.  

Transformados

Cuando eres TRANSFORMADO, aunque no tengas, siempre serás una persona transformada.  

Hay gente que tiene mucho dinero, lo pierden, y vuelven a levantarse, porque el que ya es próspero, no se trata de lo que tiene, se trata de lo que Es, y dondequiera que lo pongas, algo va a hacer, algo va a pasar y va a volver a levantarse.  

Es esa transformación que se requiere de nosotros.

En la parábola del hijo pródigo, el hermano mayor va donde el padre, y le reclama, diciéndole que nunca le había dado nada, a lo cual el padre le respondió que todo lo que él tenía era del hijo mayor, pero nunca había pedido.  

El hijo pródigo tenía la fe para pedir, pero no el carácter para sostenerlo.  

El otro, no tenía la fe para pedir, y por eso nunca disfrutó de nada.  

Amados, así hay gente en la iglesia, gente que tiene fe para pedir, pero no permiten que Dios desarrolle su carácter, para poder sostener lo que Dios le quiere dar; y tenemos los que se quejan porque otros piden.  

Dios da a los que piden, porque el que pide, recibe.  

Hay gente que se queja por las ofrendas que dan otros.  

Nadie debería meterse con las ofrendas de los demás; esas personas son los hermanos mayores que se pasan hablando de lo que otros se atreven a hacer, para ellos criticar.

Nosotros tenemos que saber que el poder de Dios no está solo para hacer, sino también para que nosotros seamos, porque cuando seas, todo lo que Dios ponga en tu mano para hacer, lo harás.  

Conclusión

Dios siempre ha querido cosas buenas para ti, pero también quiere que seas transformado por el poder del Espíritu Santo.

Si tu corazón se ha despertado para ciertos sueños, visiones, metas, y no te han salido en el pasado, es porque a lo mejor has tratado de hacer, sin primero ser.

Tienes que saber que el poder del Espíritu Santo no es solo para hacer, sino también para ser.  

Cuando seas de la manera que Dios quiere, todo lo que él ponga en tu mano para hacer, lo podrás completar.  
Hay cosas que has estado tratando para hacer, y como no te han salido, piensas que Dios no las quiere para ti, pero el problema es que no has permitido que él te haga la persona que debes ser.

Permite que el Señor te transforme en la persona que él quiere que tú seas, y sabrás que Dios está contigo, y podrás hacer todo lo que Él ponga en tu mano.
Oremos
¡Dios los Bendice!
Pastor Jorge Macías Benítez.

domingo, 20 de enero de 2019

#A173 Una Vida con Fruto

Serie : Una Vida de Oración
#A173 Una Vida con Fruto

Pastor Jorge Macías Benítez
20 de Enero, 2019






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Introducción

Queridos lectores, familia natural y de la Fe, a todo buscador de Amor, de Verdad, de Paz y de Esperanza, a todos quienes escuchan, leen y/ó ven la publicación de los Mensajes que por Gracia de Dios, Él Ministra por medio de este Hijo Suyo que les habla y escribe, ¡Bienvenidos a esta que es casa de Dios y de Su Reino, Reino de Dios Ministerios!
¡Buenos días!
Soy el Pastor Jorge Macías Benítez, su hermano e Hijo de Dios; también de corazón te tiendo la mano, te abro el corazón y te quiero recibir, dar un abrazo…¡¡¡¡en el Amor del Señor…!!!!
Esta mañana del domingo 20 de Enero del año 2019, ....
El título del Mensaje esta mañana es :
Una Vida con Fruto
Amados en Cristo, queridos amigos todos podemos vivir Tiempos muy complejos; en lo personal yo mismo, he pasado por ello en muchas ocasiones en mi vida y en las últimas semanas en lo particular.
Si de complejidad hablo y es prudente compartir contexto, no solo me refiero a lo secular sino en particular a que lo que se ha visto comprometido y que me ha demandado en concreto, es el poner a prueba mi temple; en ello y en primer lugar mi madurez espiritual, aunque claro también mi carácter como ser humano y entonces mi Posición e Identidad Espirituales.
Entonces fue que al entrar en un ejercicio de Oración y Reflexión, vino a mi corazón el cuestionarme si estaba actuando conforme a la Visión, el Propósito y la Voluntad de Dios para mi vida.
Así es como Discerní el estar compartiendo este Mensaje del Señor que nos habla de dar Fruto y que es consecuencia de un caminar conforme a la Voluntad, al Propósito de Dios y desde una Posición que solo Él nos puede dar y con la Identidad correcta, una de Hijo Suyo y Coheredero del Reino; todo lo anterior no es posible lograrlo sin Una Vida de Oración.

Oremos
Gálatas 5:22-23, dice :                               
“Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fidelidad, mansedumbre, dominio propio; contra tales cosas no hay ley.”
Amados en Cristo, queridos amigos, Conozco y entiendo también que esta porción de la Palabra de Dios, es muy escuchada aunque debo de decir también que si bien es considerada por Cristianos y no Cristianos como entendida, en realidad es poco Discernida y Recibida, Vivida testimonialmente en Sus Diseños Eternos.
Te invito a reflexionar para que luego te acompañe a profundizar hasta lograr Discernir en Su Espíritu, al respecto de esto :
En tanto las situaciones en tu vida están en control, sería sencillo pensar y creer que estamos dando fruto espiritual.
Sin embargo, ¿qué sucede cuando estás viviendo en medio de tiempo apremiantes, complejos, de algún tipo de crisis…?
Naturalmente, cuando estamos viviendo en medio de situaciones complicadas, nuestras reacciones son distintas y ello denota huecos y fracturas, inestabilidad quizá de nuestro carácter.
Tal cual nos dice en Gálatas 5 : 22-23 y por cierto es la última parte del fruto del Espíritu… “dominio propio”.
Amados en Cristo, queridos amigos, tener dominio propio sin importar si las circunstancias son complejas, apremiantes y/ó de Crisis, sólo es posible si Su Espíritu Santo, Habita en nosotros y entonces es Dios mismo actuando y nosotros estamos siendo edificados por Dios.
Ahora, es muy importante que observes que es la última parte del Fruto del Espíritu y que siendo la última, existe un Proceso en el cuál vamos dando Fruto.
Profundizando en ello precisamente, es que Dios movía mi corazón a compartir contigo que justo el reto para el hombre y al mismo tiempo el Propósito de Dios es que ese fruto está aún en medio de tiempos de Crisis.
Una pregunta mueve mi corazón :
¿Es posible Amar, estar en Gozo, Paz y paciencia, ser buenos y fieles, actuar con bondad, ser fieles y mansos y sobre todo estar en control de uno mismo, en cualquier momento de crisis…?
Vaya pregunta...ah…!!!
Vamos entonces a profundizar y Discernir al respecto de esta pregunta, esta mañana del 20 de Enero del 2019.
Creados para ser como Cristo
La Palabra de Dios nos dice en 2a. Corintios 3 : 18…
“Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor.”
Amados en Cristo, queridos amigos, solo el Espíritu Santo tiene el Poder para hacer los cambios que Dios quiere efectuar en nuestras vidas.
Este proceso se le conoce como Santificación.
No puedes reproducir el carácter de Jesús si dependes de tu propia fuerza; por el contrario, debes confiar y prestar atención al Espíritu que está entre nosotros y que si ya fuiste bautizado en el Espíritu Santo, Habita y está Activo dentro de tí.
Sin embargo, el Espíritu Santo libera su Poder en el momento en que das un paso de fe.
Dios espera que actúes primero.
Dios también usa su  Palabra, su pueblo y las circunstancias para moldearnos.
La palabra de Dios nos provee la verdad que necesitamos para crecer; el pueblo de Dios nos brinda el apoyo que necesitamos para crecer, y las circunstancias son el entorno donde practicar el carácter de Cristo.
En 1a. Juan 3 : 2, nos dice :
“Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es.”
Llegar a ser como Cristo es un proceso de crecimiento largo y en la velocidad que Dios ha determinado, Diseñado para tí.
La madurez espiritual y entonces el alcanzar el dominio propio, no es algo instantáneo ni automático; es un desarrollo gradual y progresivo que llevará el resto de nuestras vidas.
Nuestra transformación espiritual en cuanto al desarrollo de carácter de Jesús se completará cuando lleguemos al cielo o cuando Jesús vuelva.
Cuando al fin podamos ver a Jesús perfectamente, llegaremos a ser exactamente como él.
Jesús quiere hacernos como Él mismo antes de llevarnos al cielo.
Amados, queridos amigos, ¡este es nuestro privilegio principal, nuestra responsabilidad inmediata y nuestro destino final!

Como crecemos

“Cambien su manera de pensar para que así cambien su manera de vivir y lleguen a conocer la voluntad de Dios, es decir, lo que es bueno, lo que es grato, lo que es perfecto.”

ROMANOS 12:2 (DHH)
En cuanto decidamos con seriedad llegar a ser semejantes a Cristo, es entonces que en Verdad vamos a  empezar a actuar de una manera nueva.
Abandonaremos algunas rutinas viejas, desarrollaremos hábitos nuevos y cambiaremos intencionalmente nuestra manera de pensar.
Hay dos partes en el crecimiento espiritual :
  • Llevar a cabo
  • Producir
El llevar a cabo es nuestra responsabilidad.
Producir es el papel que desempeña Dios.
El crecimiento espiritual es un esfuerzo de colaboración entre nosotros y el Espíritu Santo.
“Lleven a cabo su salvación con temor y temblor, pues Dios es quien produce en ustedes tanto el querer como el hacer para que se cumpla su buena voluntad”
FILIPENSES 2: 12-13 (NVI)
“Dejen que Dios los transforme en una nueva persona, cambiando su forma de pensar. “
ROMANOS 12:2 (BAD)
El primer paso en el crecimiento espiritual es empezar por cambiar la manera de pensar.
La manera en que pienses determinará cómo te sientes, y cómo te sientes influirá en cómo actúas.
Para ser como Cristo debes desarrollar tu mente.
El Nuevo Testamento llama a este cambio mental, arrepentimiento, que en griego literalmente significa cambiar tu mentalidad...Metanoia.
Arrepentirse significa cambiar tu manera de pensar: acerca de Dios con respecto a ti mismo, al pecado, a otras personas, a la vida, a tu futuro y a todo lo demás.
Asumes la actitud de Cristo y su perspectiva.
“Cuando llegué a ser adulto, dejé atrás las cosas de niño.”
1 CORINTIOS 13:11 (NVI)
Pensar como Jesús presenta dos facetas.
La primera faceta de este cambio mental consiste en dejar los pensamientos inmaduros, los cuales son egoístas.
La segunda faceta para pensar como Jesús consiste en que empieces a meditar con madurez, enfocándose en otros, no en ti mismo.
Pensar en los demás es la esencia de ser semejantes a Cristo y la mejor evidencia del crecimiento espiritual.
Esta manera de pensar es antinatural, va en contra de nuestra cultura, es rara y difícil.
La única forma de aprender a pensar así es que nuestra mente se llene con la Palabra de Dios.
Transformados por la Verdad
“Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres”
JUAN 8:31-32
En la vida diaria, permanecer en la Palabra de Dios implica 3 acciones.
Primero, debo aceptar Su Autoridad.
Amados, la decisión más importante que puedes tomar hoy es resolver el asunto de cuál ha de ser la autoridad absoluta para tu vida.
Dios mismo debe de Ser tu máxima autoridad, a pesar de la cultura, la tradición, la razón o la emoción.
Cuando tengas que tomar decisiones, proponte hacer primero esta pregunta: ¿Qué dice Dios? Y entonces…¿qué me dice por medio de Su Palabra?
Decide que cuando Dios te pida que hagas algo, confiarás en su palabra y lo harás, tenga sentido o no, aunque no tengas ganas de hacerlo.
“Toda palabra de Dios es digna de crédito”
PROVERBIOS 30:5 (NVI)
Segundo, para permanecer en la Palabra  de Dios debo asimilar Su Verdad.
Hay 5 maneras de hacerlo: puedes recibirla, leerla, investigarla, recordarla y reflexionar en ella.
    1. Recibe la Palabra de Dios - escucha y acepta la Palabra con una mentalidad y una actitud receptiva.
    2. Lee diariamente la Biblia – te mantendrá al alcance de la voz de Dios.
    3. Investiga o estudia la Biblia – formula preguntas acerca del texto anota tus ideas.
    4. Recuerda la Palabra de Dios – memorizar los versículos de la Biblia te ayudará a resistir la tentación, tomar decisiones sabias, reducir la tensión, robustecer la confianza, brindar buenos consejos y compartir tu fe con otros.
    5. Reflexiona diariamente en las Escrituras – ningún otro hábito puede hacer más por transformar tu vida para que te parezcas más a Jesús.
Jesús dijo: “Ahora que saben estas cosas, serán dichosos si las ponen en práctica”
JUAN 13:17 (PAR)
Para permanecer en la Palabra de Dios debo aplicar sus principios. Debemos llegar a ser hacedores de la palabra (SANTIAGO 1:22).
Tercero, para permanecer en Su Palabra, debo de ser Obediente.
La bendición de Dios viene por obedecer la verdad, no solo por conocerla.
La mejor manera para llegar a ser un hacedor de la Palabra es escribir siempre un paso de acción como resultado de la lectura, estudio o reflexión sobre la Palabra de Dios. Desarrolla el hábito de anotar exactamente lo que piensas hacer.
Transformados por los tiempos de Crisis
“Dichoso el hombre que no cede a hacer lo malo cuando es tentado, porque un día recibirá la corona de vida que Dios ha prometido a los que lo aman.”
SANTIAGO 1:12 (BAD)
Tener al fruto del Espíritu es ser como Cristo.
¿Cómo, entonces, produce el Espíritu Santo estos nueve frutos en tu vida? ¿Los crea al instante?
¡Claro que No!
La fruta siempre madura y llega a su punto lentamente.
¡Dios desarrolla el fruto del Espíritu en tu vida, permitiendo que experimentes circunstancias en las que seas tentado para producir exactamente la cualidad contraria!
El desarrollo del carácter siempre involucra una elección, y la tentación proporciona esa oportunidad.
¡Cada vez que derrotas una tentación te pareces más a Jesús!
Ahora bien Amado, querido amigo, ¿Como vencer la tentación?
    1. Rehúsa ser intimidado.
      1. La tentación es una señal de que Satanás te odia, no de tu debilidad o mundanalidad.
      2. También es una parte normal del ser humano y del hecho de vivir en un mundo caído.
      3. No te sorprendas ni te asustes o descorazones por ser tentado.
      4. Sé realista en cuanto a la incapacidad de evitar la tentación; nunca podrás evitarla completamente.
La Biblia dice: cuando sean tentados…, no dice: si son tentados. No es un pecado ser tentado. Jesús lo fue, sin embargo, nunca pecó. La tentación solo se convierte en pecado cuando cedes ante ella, y esa decisión depende de ti.
    1. Reconoce lo que te tienta y prepárate.
      1. Ciertas situaciones te hacen más vulnerable a la tentación que otras.
      2. Estas situaciones son particulares para tus debilidades y necesitas identificarlas porque ¡Satanás las conoce con toda seguridad!
      3. Él sabe exactamente qué es lo que te hace tropezar y trabaja constantemente para ponerte en esas circunstancias.
      4. Debes identificar tu modelo particular de tentación y luego prepararte para evitar esas situaciones tanto como sea posible.
      5. La Biblia nos dice repetidamente que nos anticipemos y estemos listos para enfrentar la tentación.
Pablo dijo: “no le deis cabida al diablo (EFESIOS 4:27).
La planeación sabia reduce la tentación.
    1. Pídele ayuda a Dios.
      1. La Biblia garantiza que nuestro clamor por ayuda será oído porque Jesús se solidariza con nuestras luchas.
      2. Él enfrentó las mismas tentaciones que nosotros.
      3. El amor de Dios es eterno, y su paciencia es para siempre.
      4. Si tienes que clamar pidiendo ayuda a Dios doscientas veces al día para derrotar cierta tentación en particular, él estará más que dispuesto a brindarte tu misericordia y su gracia.
“Cuando el Espíritu Santo controla nuestras vidas, él producirá este tipo de fruto en nosotros: amor, alegría, paz, paciencia, benignidad, bondad, fidelidad, mansedumbre y autocontrol.”
GÁLATAS 5:22-23 (BAD)
Dando Fruto Permanentemente
“Estoy convencido de esto: el que comenzó tan buena obra en ustedes la irá perfeccionando hasta el día de Cristo Jesús.”
FILIPENSES 1:6 (NVI)
Amados en Cristo, queridos amigos, tanto el crecimiento espiritual, como el físico, lleva tiempo.
Mientras nosotros nos preocupamos en qué tan rápido crecemos, Dios se interesa en qué tan fuerte crecemos.
Dios ve nuestras vidas desde y para la Eternidad; por eso nunca tiene prisa.
El discipulado es el proceso de conformarse a Cristo.
La semejanza a Cristo es nuestro destino final, pero el viaje durará toda la vida.
Hasta ahora hemos profundizado y Discernido que este viaje involucra Creer (mediante la adoración), Pertenecer (en la comunión), y Llegar a Ser (mediante el discipulado).
¡Dios quiere que llegues a ser un poco más como él cada día!
¿Por qué toma tanto tiempo cambiar y crecer?
Nuestro aprendizaje es lento.
Olvidamos demasiado rápido las lecciones que Dios nos enseña y muy pronto regresamos a nuestros viejos modelos de conducta.
Tenemos muchos viejos hábitos que desechar.
La Biblia lo llama quitarse el viejo hombre y ponerse el nuevo hombre.
Tememos enfrentar con humildad la verdad acerca de nosotros mismos.
Solo en la medida que permitamos que Dios, con la luz de su verdad, ilumine nuestros defectos, fracasos y complejos, podremos empezar a trabajar con ellos.
A menudo el crecimiento es doloroso y nos asusta. Todo cambio involucra alguna clase de pérdida. Desarrollar hábitos lleva tiempo.
Los hábitos definen nuestro carácter.
“Todo sobre la tierra tiene su propio tiempo y su propia estación”
ECLESIASTÉS 3:1 (PAR)
Conclusión
Hay solo una manera de desarrollar los hábitos de un carácter semejante al de Cristo :
Practicarlos ¡y eso requiere tiempo! No existen hábitos instantáneos.
Si practicas algo durante un tiempo, te perfeccionas en eso. La repetición es la madre del carácter y la habilidad.
Estos hábitos que edifican el carácter se llaman a menudo disciplinas espirituales.
“Practica estas cosas. Consagra tu vida a ellas para que todos puedan ver tu progreso”
1 TIMOTEO 4:15 (PAR)
“Las cosas que planeo no ocurrirán inmediatamente. Lentamente con tranquilidad, pero con certeza, se acerca el tiempo en que la visión se cumplirá. Si parece muy lento, no desesperes, porque estas cosas tendrán que ocurrir. Ten paciencia. No se retrasarán ni un solo día”
HABACUC 2:3 (BAD)
Debes Esperar un progreso gradual.  
Cree que Dios está trabajando en tu vida aun cuando no lo sientas.
Registra todas las lecciones aprendidas.
Anota las lecciones de Dios para que puedas revisarlas y recordarlas.
Sé paciente con Dios y contigo mismo.
El programa de Dios muy pocas veces es igual al nuestro.
No te desanimes.
Recuerda cuánto has progresado, no únicamente cuánto te falta.
Oremos
¡Dios los Bendice!
Pastor Jorge Macías Benítez.