domingo, 27 de octubre de 2019

#A211 En el Poder del Espíritu Santo


Serie: El Espíritu de Verdad

#A211 En el Poder del Espíritu Santo







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Introducción

Hola buenos días, ¡Bienvenidos a esta Casa, la Casa de Dios, ¡Reino de Dios Ministerios!

Amados en Cristo, queridos amigos, las últimas 2 semanas el Señor nos introdujo en un ámbito, en una Esfera de Influencia de Su Reino, para hacernos sensibles al mover y la Presencia de Su Espíritu Santo.

Esta mañana, continúa con esta jornada preciosa, poderosa y Sobrenatural que solo es posible teniendo Relación y Comunión con Su Espíritu Santo y entonces con ÉL.

¡Hallelujah!

En el libro de Zacarías 4:6 (TLA) dice:

“(…) Dios le está mandando un mensaje a Zorobabel, y es el siguiente: “Zorobabel, no hace falta que seas poderoso, ni necesitas un gran ejército; lo único que necesitas es mi espíritu. Yo soy el Dios todopoderoso, y te aseguro que así es”.

Este 3er. Mensaje del Señor de esta Nueva serie: El Espíritu de Verdad, que lleva por título:

En el Poder del Espíritu Santo

Oremos
Su Presencia

Amados en Cristo, queridos amigos, nuestro mayor recurso en este mundo es la presencia del Espíritu Santo y Él habitando en ti.
Cuando Jesús se fué, envió al Espíritu Santo para que Él esté con nosotros ayudándonos en todo.
Recordemos lo que nos dice en nuestro fundamento esta mañana en Zacarías 4:6 (TLA) que dice:
“(…) Dios le está mandando un mensaje a Zorobabel, y es el siguiente: “Zorobabel, no hace falta que seas poderoso, ni necesitas un gran ejército; lo único que necesitas es mi espíritu. Yo soy el Dios todopoderoso, y te aseguro que así es”.
La Biblia dice que el Señor nos ha dado su Espíritu Santo para que esté con nosotros, y en nosotros.
Dice la Palabra de Dios:
“Pero el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, El os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que os he dicho.”
Juan 14:26
Ésta es la mayor defensa, ayuda y recurso que un hijo de Dios tiene, la persona del Espíritu Santo.
Jesús pagó el precio para que así sea.
Por eso, enfrenta los desafíos que tienes por delante creyendo y hablando, declarando que el Espíritu Santo está operando a tu favor, porque tu caminas en el Propósito de Dios.
¿Por qué estás caminando en el Propósito de Dios? ¿Verdad?
Caminando en el Propósito de Dios

Amados, en nuestro caminar con Dios debiéramos irnos desarrollando de forma contínua; si así lo hacemos tendremos un crecimiento continuo y en la medida que le Conocemos vamos disfrutando de un diario vivir con Él, como nuestro hacedor y gobernador.

Es entonces que en Verdad, empezamos a caminar de acuerdo a Su Propósito, a Su Voluntad para nuestras vidas y que llegamos a tener un nivel de “Entendimiento” que nuestra vida le pertenece a Él.

Es en medio de este caminar que encontramos que hay momentos especiales con el, en donde el espera que manifestemos lo que nos ha entregado.

Lo que llevamos como "Vasos de Honra".

Amados, la palabra declara tenemos un deposito en nosotros de la naturaleza divina; esta naturaleza divina es expresada y vista a medida que vamos operando y desarrollando toda la vida que delata nuestra con el relación con Él.

La Biblia declara que Dios nos conoce desde el momento en que fuimos Engendrados o Creados; esto nos hace responsables de vivir la vida a la manera de El.

En el Salmo 139 encontramos a David, dando palabras y expresandole que le reconoce, en su andar diario como su Dios y que sabe que ha estado presente en su vida dia tras dia. 

David, Conocía que Dios ya le ha visto; el sabe para donde va.

Dios conoce su futuro.

Amados, si Dios es el que lo dirige su futuro no será incierto, porque tiene un "Proposito Divino."

Dios tenia ya un Propósito especial para David, uno que nadie haría, solo el.

¿A que me refiero cuando hablo de Propósito

Amado en Cristo, querido amigo, Escucha; todo en tu vida esta Diseñado, dirigido, planeado y establecido por Dios.

Tiene que ver con que Dios tiene Su Propósito perfectamente establecido para ti, de acuerdo a lo que a Su Voluntad, para ti en todo lo que hagas Dios estará presente nuestro creador y hacedor; Él nos conoce desde el vientre de nuestra madre. Es mas, nos conoce desde antes de ser engendrados o creados.

Es así como el Salmista lo declara detalladamente.

Salmos 139:13

“Tú creaste las delicadas partes internas de mi cuerpo y me entretejiste en el vientre de mi madre.”

¡Porque Tu me creaste!

Amado, Dios no hace nada mal; todo lo que el hace lo hace Bien y el sabe porque lo hace, ¡¡Hallelujah!!

En lo Oculto Fui Formado y Entregado; Alli donde nadie vio, Él hizo su deposito divino en ti.

Su esencia divina, soplo aliento de vida en ti.

Por eso es que hay cosas que visionas para realizar y te cuesta expresarlas porque eres tu el llamado a realizarlas porque Dios las puso en Ti, y poder verlo implica tener una Relación personal e íntima con Dios, aunque también madura y por ello permanente.

Amado en Cristo, querido amigo, Dios nos entregó acceso a Su Espiritu y también a Su "Sello de Pertenencia".

Escucha lo que dice la Palabra de Dios en Efesios 1:13

“En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa” énfasis por el Ps. Jorge Macías

Este sello Amados, indica que somos Propiedad Privada del Creador, que nadie nos puede tocar, que nadie se Puede atrever siquiera a insinuar hacer mal y también nos entrega Su Identidad.

Aunque pasemos por en medio de cualquier situacion, en medio del fuego, vamos con ese Sello de Propiedad Privada de Dios y en 1er. Lugar, con Su Identidad de Ser Hijos y Co Herederos del Rey de Reyes, ¿Quién dice Amén? 

Amado, Escucha, tu y yo tenemos una gran ventaja y es que el poder Sobrenatural más grande que pueda existir, vive en nostros si ya está el Espíritu en ti – por medio del Bautismo del Espíritu Santo -  y con Él entonces podremos alcanzar y lograr cosas que humanamente son imposibles.
¡Quién dice Amén!
Estrategia contra la Idolatría

Amados en Cristo, queridos amigos, la Idolatría es confiar en cualquier cosa o persona antes que en Dios.
No te lamentes por no recibir apoyo o ayuda de los hombres; la mejor estrategia que tienes en todo lo que hagas es la ayuda del Espíritu Santo que es el Consolador, el Ayudador, el Espíritu de Verdad.
Jesús dijo en Juan 14:16:
“Y yo le pediré a Dios el Padre que les envíe al Espíritu Santo, para que siempre los ayude y siempre esté con ustedes”.
La Biblia es la revelación de la Verdad de Dios, y está diseñada para su uso regular por todo creyente e Hijo de Dios.

En ello, la presencia del Espíritu Santo en ti, en mi - no solo entre nosotros - es una necesidad, ya que es Él quien aclara el Entendimiento y el Discernimiento de la Palabra de Dios.

El Espíritu Santo “ilumina” la mente de cada persona que busca realmente Conocer en el corazón a Dios.

Dice la Palabra de Dios:
“Lámpara es a mis pies tu palabra,
Y lumbrera a mi camino.”
Salmos 119:105

Cuando leemos la Biblia, el Ayudador, el Espíritu Santo, abre nuestro Entendimiento para que conozcamos el verdadero significado del texto, de modo que podamos Conocer sus implicaciones.

Dice la Palabra de Dios:

“Entonces les abrió el entendimiento, para que comprendiesen las Escrituras;” Lucas 24:45

Amados, nunca podremos dejar de necesitarlo; incluso un creyente con años de experiencia en el estudio de la Palabra, requiere de tanta Revelación como un niño espiritual que acaba de recibir a Cristo.

Recientemente, tuve motivos para recordar este hecho al leer un pasaje que había visto a menudo en mis estudios.

Por primera vez, mi alma se abrió del todo a estos versículos, la verdad entró como un torbellino y me sentí revitalizado.

Discernir una nueva Verdad por medio de la Revelación del Espíritu Santo, enciende en nosotros un Fuego inexplicable e incontenible; este nos levanta a poner en práctica lo que hemos Recibido.

Escucha, cuando integramos esa Verdad a nuestra vida, el Espíritu de Dios nos revela otra para hacernos cada vez más como nuestro Salvador.

Conocer a Dios y en el proceso ir tomando la imagen de Jesucristo en nosotros mismos, es el más Alto Anhelo de la vida cristiana; ello solo lo alcanzaremos pasando tiempo en la intimidad con Dios y entonces en la Llenura del Espíritu Santo.
Si queremos que el Espíritu Santo nos revele la Verdad y esta en la Intimidad con Dios y su Fundamento en la Palabra de Dios, debemos pedirle primero que nos muestre en donde nuestro corazón, nuestra humanidad, se encuentra en pecado.

Cuando finalmente Discernimos la falta que nos hace permitir a nuestro Ayudador el hacerlo, nuestro corazón se abre a su Revelación e Iluminación.

El Poder del Espíritu Santo

En Romanos 8:11-14, la Palabra de Dios dice:
“11 Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros.
12 Así que, hermanos, deudores somos, no a la carne, para que vivamos conforme a la carne; 13 porque si vivís conforme a la carne, moriréis; mas si por el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis. 14 Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, estos son hijos de Dios.”

Amados en Cristo, queridos amigos, el Espíritu Santo es una persona; sin embargo un error muy persistente que la mayoría comete, es que lo presenta como una especie de fuerza abstracta.
La creencia detrás de esa idea es que “el poder del Espíritu Santo” es algo que los cristianos ejercen por sí mismos.
Amados, en Verdad, la frase se refiere a la actividad de Él en la vida del creyente.
Jesús fue muy claro cuando dijo a sus discípulos que no estarían listos hasta que recibieran Poder de lo alto.
Dice la Palabra de Dios en Lucas 24:49
“He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto.” Énfasis por el Ps. Jorge Macías Benítez

Amados, se necesitan dos esto es tanto el creyente como el Espíritu Santo, para vivir en victoria.
Él viene a estar en medio de nosotros en el momento que recibimos el perdón de Cristo por nuestros pecados y entonces en Su Bautismo, el del Espíritu Santo conforme a lo que atestigua Pablo en Hechos 19:1-7, a morar en nosotros.
Dice la Palabra de Dios en Hechos 19:1-7
“1 Aconteció que entre tanto que Apolos estaba en Corinto, Pablo, después de recorrer las regiones superiores, vino a Éfeso, y hallando a ciertos discípulos, 2 les dijo: ¿Recibisteis el Espíritu Santo cuando creísteis? Y ellos le dijeron: Ni siquiera hemos oído si hay Espíritu Santo. 3 Entonces dijo: ¿En qué, pues, fuisteis bautizados? Ellos dijeron: En el bautismo de Juan. 4 Dijo Pablo: Juan bautizó con bautismo de arrepentimiento, diciendo al pueblo que creyesen en aquel que vendría después de él, esto es, en Jesús el Cristo. 5 Cuando oyeron esto, fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús. 6 Y habiéndoles impuesto Pablo las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban en lenguas, y profetizaban. 7 Eran por todos unos doce hombres.”

De allí en adelante, la tarea del Espíritu es preparar a los creyentes para su ministerio diario de mostrar al Señor y el Reino de Dios, al mundo.
Cuando el apóstol Pablo dijo:
“Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”
Filipenses 4:13
Estaba hablando de la presencia interior del Espíritu Santo.
Lo que esto significa es que en el creyente hay fuente de poder.
Amados, el Espíritu obra por medio de las personas para llevar a cabo lo que es imposible que ellas logren por sí solas.
De hecho, la Biblia dice que Él es “poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos” como dice Efesios 3:20.
Lo cual Pablo demostró con su fértil ministerio.
¿Te está llamando Dios a hacer cosas “mucho más abundantemente” de lo que usted cree que puede realizar?
¡Deja de dar excusas, y pon manos a la obra!
Amado, en ti hay un potencial sin explotar; ¡no por tus propias fuerzas o capacidades, sino por el poder sin límites del Espíritu Santo, el cual se liberará en respuesta al actuar tu con fe!
Oremos

Dios Padre te pido que llenes mi vida con el Espíritu Santo. Abro ahora las puertas y le doy la bienvenida al Espíritu Santo a mi casa, mi salud, mi economía, mis relaciones y todas las áreas que conforman mi vida en el nombre de Jesús, Amén.

¡Dios los Bendice!

Ps. Jorge Macías Benítez