Nueva Serie: El Más Grande Poder
Jorge Macías B.
30 de Octubre 2022
#A355 El Poder más Grande
“Y cual la supereminente grandeza de su poder para con nosotros los que creemos, según la operación del poder de su fuerza, la cual operó en Cristo resucitándole de los muertos y sentándole a su diestra en los lugares celestiales” (Ef. 1:19-20).
“El poder que actúa en nosotros” (Ef. 3:2).
¿Cuál es la fuerza más grande que opera en este mundo?
¿El tsunami? ¿Un terremoto?
¿El calentamiento de la planeta?
Hay una fuerza mucho mayor.
Es el poder capaz de romper el ciclo de muerte y descomposición que ha dominado el mundo desde el pecado de Adán y Eva, cuando entró en el mundo, sujetando la naturaleza al dominio de la muerte. Hay un poder superior que introdujo en el mundo un nuevo ciclo de resurrección y inmortalidad. ¡No hay poder mayor que este! Ha roto la fuerza de la maldición de muerte que mantuvo cautivo al mundo. Se desató la mayor expresión del poder de Dios con la resurrección de Cristo, como primer ejemplo de su eficacia.
Las Crónicas de Narnia ilustran el encantamiento maléfico del mal como el poder de invierno que dominó el país bajo la tiranía de la Bruja Blanca. Empezó a perder fuerza con el advenimiento de Aslan, pero realmente tomó efecto cuando el León Emperador resucitó. Su resurrección rompió el encantamiento de la bruja e introdujo vida y inmortalidad en Narnia.
Es como la visión de Ezequiel del valle de los huesos secos (Ez. 37). Vemos como el ciclo de muerte y descomposición fue puesto al revés. La naturaleza se dio marcha atrás. Los huesos secos se juntaron.
Luego se cubrieron de carne y eran cadáveres enteros.
Finalmente cobraron vida y se levantaron, caminaron y vivían.
Es el poder que levantó a Jesús de entre los muertos, pero no se limita a este acto.
La resurrección de Cristo solo es un botón de muestra.
Aquel día, Dios introdujo un nuevo principio que antes no estaba presente en el mundo.
Rompió el ciclo de muerte de la naturaleza.
La resurrección de Cristo no fue como la resurrección de Lázaro que solo dio vida a Lázaro.
El poder que efectuó la de Cristo sigue operando.
Es suficiente para superar el poder de la muerte, dejándola con un dominio solamente temporal, sin su poder eterno.
El poder de VIDA es superior al poder de la muerte.
Este es el poder que está funcionando en nosotros.
Empezó a funcionar cuando Dios nos dio vida (Ef. 2:1) y sigue operando en nosotros rompiendo el poder del pecado que nos ha esclavizado toda la vida. Rompe hábitos viejos.
Cuando echamos mano a este poder, ¡cambiamos! Hay suficiente poder a nuestra disposición, residiendo dentro de nosotros desde el día de nuestra conversión, para cambiar nuestra disposición y transformarnos por completo, para ser cada vez más como Cristo.
Este poder te dio nueva vida y, cuando echas mano a él, te irá transformando, hasta el día que veas al Señor. ¡Aleluya!
no hay Poder más grande que el Amor de Dios
La palabra del Señor nos enseña, en el Libro de Génesis, que Abraham y Sara no tenían hijo (Sara era estéril); sin embargo, ellos tenían una promesa de Dios al respecto. El tiempo transcurría y pasaron varias décadas, y el hijo prometido por Dios no llegaba; pero en el tiempo del Señor y en contra de toda posibilidad humana, Dios cumplió lo que había prometido.
La Biblia nos enseña que el Señor realizó un milagro en la vida de Abraham y Sara, pues ambos eran de edad avanzada y ella era estéril. En el tiempo de Dios nació Isaac, por encima de todos los obstáculos, dificultades y argumentos humanos.
La Biblia misma nos enseña que cuando Dios le hizo la promesa de un hijo a Abraham y Sara, ella no creyó al principio; fue en aquel momento cuando el Señor le pregunto: “¿Hay para Dios alguna cosa difícil?”. Y sin duda, sabemos muy bien la respuesta: Todo es posible para Dios.
No existe cosa difícil para nuestro poderoso Dios, todo es posible para él; más bien, lo que requiere es que sus hijos le crean, que ellos confíen y perseveren en sus fieles promesas, pues el Señor hará todo lo que ha dicho.
Es interesante, recordar aquí las palabras del Libro de Job 8:5-7 “Si tú de mañana buscares a Dios, y suplicares al Todopoderoso; Si fueres limpio y recto, ciertamente luego se despertará por ti, y él prosperará la morada de tu justicia. Aunque tu principio haya sido pequeño, tu postrer estado será muy grande”.
Podemos decir, que un escenario de dificultades, de crisis o de oposición, es un terreno en el que aparecen el desánimo y la frustración, los cuales acechan contra nuestro corazón para provocar la renuncia o la murmuración.
Podemos recordar, por ejemplo, a los discípulos del Señor Jesús, quienes ante su muerte, estaban tristes y desanimados. La Biblia nos enseña que fueron las mujeres quienes se dirigieron al sepulcro a buscar a Jesús, los discípulos no lo hicieron. Estaban sumidos en tristeza y decepción.
Adicional a esta situación, los discípulos de Jesús debían enfrentar a los enemigos del evangelio, es decir, al Imperio romano; además de los celosos líderes religiosos, los judíos que no creían en Jesús como el Mesías, entre otros. Sin embargo, sólo tres días después de morir, el Señor Jesús se levantó de los muertos, alcanzando la más grande victoria para aquellos que habían de creer.
Ante todo esto, podemos estar convencidos que para Dios todo es posible. En medio de las más grandes adversidades, ante diversos obstáculos, ante gigantes enemigos, debemos tener presente: “No hay nada difícil para Dios”, él es Todopoderoso, y tiene el gobierno de todas las cosas.
Dios es más grande que tu problema
No es extraño que en ocasiones nos enfrentamos a situaciones adversas y difíciles que nos marcan profundamente en nuestro ser, llegamos a creer que todo está perdido y hemos sido derrotados por aquel problema, ese problema que quizás, la mayor parte del tiempo nos hace sentir débiles, quebrantados , ahogados y desesperados; que nos hace pensar que ya nada podemos hacer al respecto. Hay ocasiones en las que es tan difícil pensar positivamente que cada día que pasa nos consume y nos aqueja “ese problema”.
Si bien es cierto, vivimos en tiempos duros, pero la mayor parte del tiempo creemos que nunca nos pasará algo malo, pero cuando llega el momento difícil comienzan nuestras dudas: ¿Por qué a mí?, ¿En qué he fallado? O ¿ Qué he hecho de mal para merecer esto?, y esto se transforma en una tormenta que nunca acabará, por lo tanto este suceso llamado “ problema” no nos permite ver nuestro mundo a color, con esperanza, amor y confianza, sino mas bien en un tono gris y frío y nos perdemos las cosas simples de la vida, como es disfrutar cada momento, ya sea positivo o negativo.
LA SABIDURIA DEL ÁGUILA
El águila es el ave con mayor longevidad de esas especies. Llega a vivir 70 años, pero para llegar a esa edad, a los 40, debe tomar una seria y difícil decisión.
A los 40 años, sus uñas están apretadas y flexibles y no consigue tomar a
sus presas de las cuales se alimenta. Su pico largo y puntiagudo, se curva, apuntando contra el pecho. Sus alas están envejecidas y pesadas y sus plumas gruesas. Volar se hace ya tan difícil!
Entonces, el águila tiene solamente dos alternativas: morir o enfrentar un dolorido proceso de renovación que durara 150 días. Ese proceso consiste en volar hacia lo alto de una montaña y quedarse ahí, en un nido cercano a un paredón, en donde no tenga la necesidad de volar.
Después de encontrar ese lugar, el águila comienza a golpear su pico en la pared hasta conseguir arrancarlo. Luego debe esperar el crecimiento de uno nuevo con el que desprenderá una a una sus uñas.
Cuando las nuevas uñas comienzan a nacer, comenzará a desplumar sus plumas viejas. Después de cinco meses, sale para su vuelo de renovación y a vivir 30 años más.
En nuestras vidas, muchas veces tenemos que resguardarnos por algún tiempo y comenzar un proceso de renovación para continuar un vuelo de victoria, debemos desprendernos de costumbres, tradiciones y recuerdos que nos causaron dolor. Solamente libres del peso del pasado podremos aprovechar el resultado valioso que una renovación siempre trae.
Haz de Dios tu habitación:
Dios nos invita a entrar y morar en su habitación, los que habitan y hacen refugio en su habitación son los que confian en Dios y ponen su mirada en Jesús.
Reina Valera Revisada (1960) Mateo 6
6 Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta,c ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.
1. La habitación del creyente:
a) Habita al abrigo del Altísimo (Sal. 91:1).
b) Mora bajo la sombra del Omnipotente (Sal. 91:1).
1. La habitación del creyente:
a) Una defensa segura es un buen ataque ().
Para conquistar las batallas tienes que saber que sin Dios estas derrotado, este salmista sabia que para ganar las batallas tenia que permanecer en Dios y poner toda su confianza en Él.
TU DEFENSA ES DIOS Y TU REFUGIO, AHI ES EL LUGAR DE FORTALECERTE Y CONFIAR EN SUS PROMESAS. SINO NO SALGAS A LA BATALLA PUES TERMINARAS DERROTADO. (Samuel 16:6-13)
TUS BATALLAS MAS GRANDES ESTAN A SOLAS CON DIOS. (Samuel 17:32-36)
b) Mora bajo la sombra del Omnipotente ().
LO MAS MARAVILLOSO DE MORAR BAJO LA SOMBRA DE DIOS ES DESCANSAR EN ÉL.
Reina Valera Revisada (1960) Capítulo 11
28Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar
c) En su habitacion el muestra tus sendas tus peligros
Reina Valera Revisada (1960) Capítulo 22
31Dijo también el Señor: Simón, Simón, he aquí Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo; 32pero yo he rogado por ti, que tu fe no falte; y tú, una vez vuelto, confirma a tus hermanos.
En vez de ir a la batalla se resguardo en su habitación, Y PECÓ
EL ÁGUILA Y LA TORMENTA
¿Sabías que un águila sabe cuando una tormenta se acerca mucho antes de que empiece?
El águila volará a un sitio alto para esperar los vientos que vendrán. Cuando pega la tormenta, coloca sus alas para que el viento las agarre y le lleve por encima de la tormenta. Mientras que la tormenta este destrozando abajo, el águila vuela por encima de ella.
El águila no se escapa de la tormenta. Simplemente usa la tormenta para levantarse más alto. Se levanta por los vientos que trae la tormenta. Cuando las tormentas de vida nos vienen – Y todos nosotros vamos a pasar por ello - Podemos levantarnos por encima poniendo nuestras mentes y nuestra fe hacia Dios.
Las tormentas no tiene que pasar sobre nosotros. Podemos dejar que el poder de Dios nos levante por encima de ellas.
Dios nos permite ir con el viento de la tormenta que trae enfermedad, tragedia, y demás cosas en nuestras vidas.
Podemos volar sobre la tormenta.
Recuerda, no son los pesos de la vida que nos lleva hacia abajo, sino el como los manejamos.
La Biblia dice, – "pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán."
La determinación del creyente:
«Diré yo a Jehová: mi Dios, en quien confiaré». DI A TUS PROBLEMAS CUAN GRANDE ES TU DIOS
«Diré yo a Jehová: mi Dios, en quien confiaré». DI A TUS PROBLEMAS CUAN GRANDE ES TU DIOS
REMEDIO PARA EL TEMOR
Jn. 16:33.
En el año 1735 Juan Wesley viajó desde Inglaterra a la Colonia de Georgia en las Américas. En medio del Atlántico el buque encontró una tempestad que puso en peligro la vida de los tripulantes y de los pasajeros. Juan Wesley se encerró en su cuarto; pero allí pudo oir el canto de un grupo de moravos que, no teniendo recursos para pagar la comodidad de unos camarotes, tuvieron que quedarse en la cubierta y sufrir la furia de la tempestad. Después el señor Wesley preguntó a uno de los moravos cómo ellos y sus niños podían cantar en circunstancias tan terribles. El moravo le contestó con una pregunta: “Señor Wesley, ¿conoce usted a Jesucristo? Para el creyente, Jesús echa fuera el temor.”
El valor del creyente:
a) Esperanza mía ().
b) Castillo mío ().
c) Mi Dios en Él confiaré ().
4. El valor del creyente:
- Porque Él te librará del lazo del cazador y de la peste destructora ().
SOLAMENTE JESUS TE PUEDE LIBRAR DE TUS TEMORES
(Marcos 9:14-29)
2) Porque con tus plumas te cubrirá y estaras seguro ().
CUAN IMPORTANTE ES ESTAR EDIFICADO SOBRE LA ROCA
Reina Valera Revisada (1960) Capítulo 7
24Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca. 25Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca. 26Pero cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un hombre insensato, que edificó su casa sobre la arena; 27y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y dieron con ímpetu contra aquella casa; y cayó, y fue grande su ruina.
28Y cuando terminó Jesús estas palabras, la gente se admiraba de su doctrina; 29porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas.
La inteligencia del creyente:
«Ha conocido mi nombre» ().
Reina Valera Revisada (1960) Capítulo 9
23Así dijo Jehová: No se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se alabe el valiente, ni el rico se alabe en sus riquezas. 24Mas alábese en esto el que se hubiere de alabar: en entenderme y conocerme,a que yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra; porque estas cosas quiero, dice Jehová.
Reina Valera Revisada (1960) Capítulo 9
24Mas alábese en esto el que se hubiere de alabar: en entenderme y conocerme,a que yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra; porque estas cosas quiero, dice Jehová.
El amor de Dios
El poder más Grande
Ante las ofensas o decepciones podemos permitir que la raíz de amargura nazca en el corazón, o permitir que el resentimiento levante grandes murallas en la familia, o separe matrimonios. Sin embargo Dios nos muestra su más grande amor al dar a su Hijo por nosotros.
Por amor Jesús venció, por amor podemos obedecer, vencer al enemigo, rescatar nuestra familia, avanzar hacia el plan de Dios, por amor podemos vivir más para Dios que para nosotros mismos…
Predica: El amor de Dios es el poder más grande.
El amor de Dios siempre prevalecerá. Recordemos que el apóstol Pablo por el Espíritu Santo dijo: “Y ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor, estos tres; pero el mayor de ellos es el amor” 1 Corintios 13:13.
Veamos un ejemplo de la preeminencia del amor en la vida de Abraham. La Biblia nos enseña que Abraham y Lot se tuvieron que separar pues quienes cuidaban sus ovejas comenzaron a tener diferencias por los espacios para pastorear, y Abraham le dijo:
“No haya ahora altercado entre nosotros dos, porque somos hermanos. Delante está la tierra, si vas a la izquierda, yo iré a la derecha, y si vas a la derecha, yo iré a la izquierda”.
Antes estas cosas sucedidas Abram no había quedado con resentimientos hacia su sobrino Lot, él había perdonado cualquier ofensa y ahora desea el bienestar y libertad para su familia.
A veces en nuestra casa o familia se presentan crisis, y estas son oportunidades para ejercer el perdón y no desear venganza, ni la tragedia para el otro. Abram estaba bendecido y en paz, pero él desea lo mejor para su sobrino Lot.
Colosenses 3:12-14 “Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia; soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro… Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto”.
El Espíritu Santo aquí nos recuerda la importancia del amor de Dios en nuestro corazón para tolerar, soportar y perdonar; el amor de Dios es el vínculo perfecto es decir, es el poder de Dios que mantiene unida la familia, el matrimonio, la iglesia, etc.
Vemos además que Abram tomó una actitud valiente para batallar por la libertad de su familia, él “Armó a sus criados”, y “cayó sobre ellos de noche y les atacó”, sabemos por la Biblia que Abram no era un hombre de guerra, pero aquí se llenó de valor para rescatar a su familia, y no renunció ni abandonó su campaña hasta verlos libres. Así mismo Jesucristo el Señor está con nosotros para rescatar, salvar y bendecir nuestra familia.
Por amor el Padre envió a su Hijo, por amor Jesús dio su vida por nosotros, por amor él alcanzó la victoria más grande en toda la historia al resucitar, es entonces el amor el más grande poder.
Conclusión: Si permitimos que el amor de Dios gobierne nuestra vida, todo será diferente, pues la capacidad para tolerar y perdonar fluirá, la atmósfera familiar será una bendición; la capacidad para obedecer a Dios será mayor, pues quien ama a Dios guarda sus mandamientos.
Oremos
¡Dios les Bendice!
Ps. Jorge Macias Benitez.