martes, 27 de junio de 2017

#A98 Viviendo en el Amor Sobrenatural de Dios

Serie : Nueva Ministración
#A98 Viviendo en el Amor Sobrenatural de Dios
#REINODEDIOS Ministerios

Captura de pantalla 2017-06-27 a la(s) 10.50.46.png


Página Web : http://reino-de-dios-ministerios.org
Página Facebook : Reino de Dios Ministerios
Blog : reinodediosministerios.blogspot.mx
Soundcloud : Jorge Macías Benítez
Google Plus : Pastor Jorge Macías Benítez
Twitter : Pastor Jorge Macías Benítez
YouTube : Pastor Jorge Macías Benítez Canal :  Reino de Dios Ministerios






Inicio


Queridos lectores, familia natural y de la Fe, a todo buscador de Amor, Verdad, paz y Esperanza, ¡Bendiciones!


Además para quienes Ahora mismo estamos acá en vivo y presentes en la Casa de Dios, Reino de Dios Ministerios, ¡Buenos días y Bienvenidos!


Durante la semana y en nuestro tiempo determinado a la Oración y la Intercesión, para buscar la Visión y la Dirección de Dios, el Señor me habló con claridad de lo que Él nos va a Ministrar esta mañana, cuyo Mensaje lleva por título :


Viviendo en el Amor Sobrenatural de Dios


La Biblia nos dice que “Dios es Amor” en 1a. Juan 4:8.


Ahora, ¿Cómo podemos siquiera comenzar a comprender esa verdad?


Tomando como Inicio esa pregunta es que el Señor me ha llevado a profundizar en al menos 3 Dimensiones que nos entregarán Fundamento para con ello Discernir este Su Amor Sobrenatural y el cómo es Vivir dentro de esa Esfera, todo lo cual es Su Diseño y Voluntad para Sus Hijos.


Su Fundamento central es este :


“16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.” Juan 3:16
Oración


Cuando el Señor nos dice que si creemos en Cristo, no nos perderemos y tendremos Vida Eterna, en Verdad ¿a que se refiere?


El Señor me mostro 3 de las Dimensiones Espirituales que son impactadas y nos cambian completamente cuando Vivimos dentro de Su Esfera de Amor Sobrenatural :


  1. Ciclos por cerrar
  2. Personas que perdonar
  3. Relaciones que Renovar o Restaurar


Cuando ello ocurre, ocurre lo que Su Palabra dice :


“17 De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.” 2a. Corintios 5:17


Amados en Cristo, en Verdad el movernos y evolucionar en estas 3 Dimensiones de la Esfera del Amor Sobrenatural de Dios nos da Posición como una Nueva Criatura delante de Él.


Ahora, vamos a profundizar en ellas.


Cerrando Ciclos


El principio en esta Dimensión es muy sencillo, pues no es posible avanzar y evolucionar sin antes finalizar y cerrar el proceso o ciclo que define el tiempo que Dios quiere que dejemos atrás para llevarnos a nuestro siguiente tiempo.


Si, la vida espiritual en Verdad es el fundamento de la vida natural y por ello es que al igual que en la vida natural, en la espiritual nos es necesario crecer y madurar; ese es el Diseño de Dios.


Madurez Espiritual


Eclesiastés 1:18
"Porque en la mucha sabiduría hay mucha molestia;
 y quien añade ciencia, añade dolor."


Los cambios de niveles espirituales, Crecer espiritualmente exige disciplina, responsabilidad y principalmente Obediencia.


El caminar hacia nuestro crecimiento espiritual añade guerras y persecuciones que exigen principalmente en nuestra mentalidad y actitud, un cambio radical. Quien Anhela recibir y alcanzar niveles superiores de espiritualidad, tendrá que disponer su cuerpo, espíritu y alma para las batallas en diversos niveles de enfrentamientos.


1 Corintios 2:14
"Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente."


En el proceso, habrá quien no logre Discernir y entonces tampoco comprender  lo que el Señor nos Ministra; en Cristo te pido no insistir en hacerlo intelectualmente pues todo esto Es de carácter espiritual.


Despojémonos de andar ligeros


¿Puede alguno hablar de lo que no sabe? ¿Puede alguien explicar cosa que no entiende? ¿Cómo dar lo que no tengo e impartir lo que me falta?


Diversas doctrinas actuales se apoyan en el concepto que "declarar" las palabras de la Biblia o decir "en el nombre de Jesús" tiene un efecto de defensa y ataque automático.


Ciertamente el Vivir con la Certeza de nuestra Salvación es suficiente si sencillamente nos conformamos con quedarnos así y ahí, en la entrada del camino al Reino, al inicio del Proceso a la Madurez espiritual hasta la estatura del Varón perfecto.


Esto resulta muy cómodo y atractivo pues la mayoría se ha unido a ese sentir, en vez de comportarse valientemente y responsablemente como requiere ser un discípulo o guerrero de Jesucristo.


Mateo 6:7
"Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos."


El Poder de la Palabra no está en la letra ni en lo que se dice, sino en la Autoridad Espiritual con la que se Declara, y esto va de acorde a la SANTIDAD.


Los cristianos que declaran La Palabra sin conocimiento de Dios y sin autoridad espiritual, se asemejan a aprendices de 'mago para fiestas' que se les enseña a repetir movimientos y palabras para impresionar a los espectadores, ciertamente los demonios quedan "impresionados" y aplauden este tipo de cristianos, pues les resulta muy divertidos.


Otra doctrina vacía de resultado espiritual está en las vanas repeticiones de rezos y plegarias. Estas cosas no funcionan para bien; su poder espiritual es muy débil y hasta maligno para quienes lo practican.


Mateo 7
“22 Muchos me dirán en aquel día:
Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre,
y en tu nombre echamos fuera demonios,
y en tu nombre hicimos muchos milagros? 23 Y entonces les declararé: Nunca os conocí;
apartaos de mí, hacedores de maldad.”


Magia blanca, mentiras piadosas, superstición, juegos de azar, horóscopo, ropa indecorosa, televisión, juegos de pantalla, no dar diezmos ni ofrendas porque tengo muchas deudas… Todas cosas que se practican deliberadamente en la iglesia.


Los demonios son especialistas en disfrazarse de luz, se hacen pasar por buenos y hasta hacen creer que sus poderes y favores ayudan a las gentes, pero ¿puede acaso un demonio ser bueno? ¿Puedo decir que me respalda la verdad si practico la mentira? ¿Puede alguien hacer el bien si está apoyándose en poderes de demonios y no de Dios?


Muchos cometen este error : creyendo que sirven a Dios, se están sirviendo a sí mismos y a los hombres, utilizando técnicas de demonios en el nombre de Jesús.

Lucas 11:22
"Pero cuando viene otro más fuerte que él y le vence,
le quita todas sus armas en que confiaba, y reparte el botín."


¿Es correcto hacer guerra espiritual?


Escucha, la Biblia habla muchísimo de Guerra Espiritual pero en misterios, en revelaciones, en contextos, en secretos de Dios.


Para alcanzar victoria hay que primero Conocer a Dios y entonces Él nos Revela Su Verdad en el conocimiento de la Biblia.


Para ser “hábil” en las guerras espirituales, nos es necesario :


  1. Conocer a Dios
  2. Tener una Relación personal e íntima con Él
  3. Orar sin cesar
  4. Clamar por Visión y Revelación Suya
  5. Profundizar en Su Palabra
  6. Obedecer
  7. Actuar


Todo lo anterior nos requiere mucha, muchísima Disciplina.


Unos años atrás, 7 para ser concreto tuve un encuentro con un Varón de Dios, Líder de Cristo en Nigeria de nombre Joseph Aliyu a quien Dios utilizó para Ministrarme durante aquellos inolvidables 30 días en aquella Isla en medio del Océano Pacífico y quién me dijo :


“Vive una vida cuyo estilo y olor sea evangelismo puro”


Ahora, ¿cómo estamos viviendo nuestras vidas los hijos de Dios?


Escucha, a causa de la falta de conocimiento bíblico y comunión espiritual, multitudes de cristianos dicen "En El Nombre De Jesús" con tanto o peor efecto que si dijeran "Abracadabra".


¿Por que? Porque no hay madurez espiritual y entonces los hijos de Dios van caminando por su vida cristiana y espiritual, dejando un sin fin de Ciclos sin cerrar.


Otra Dimensión para Vivir en el Amor Sobrenatural de Dios :


Personas que perdonar
Para entrar en est Dimensión, tratemos primero de responder a una pregunta :
¿Ques significa perdonar?
Perdonar significa disculpar a alguien que nos ha ofendido o no tener en cuenta su falta.
En la Biblia, la palabra griega que se traduce “perdonar” significa literalmente “dejar pasar”, como cuando una persona deja de exigir que se le pague una deuda.
Jesús usó esta comparación al enseñar a sus discípulos a orar :
“Perdónanos nuestros pecados, porque nosotros mismos también perdonamos a todo el que nos debe” Lucas 11:4
De igual manera, en la parábola del esclavo que no mostró misericordia, Jesús explicó que el perdón es como la cancelación de una deuda (Mateo 18:23-35).
Perdonamos a otros cuando dejamos de guardar resentimiento y no insistimos en pedir una compensación por el daño que nos hayan hecho o por la pérdida que hayamos podido sufrir.
La Biblia enseña que el perdón se basa en el amor sincero, ya que el amor “no lleva cuenta del daño” como dice en 1a. Corintios 13:4-5.

Ahora, perdonar no significa:

  • Aprobar la ofensa.
    • La Biblia condena a quienes consideran una mala acción como aceptable o inofensiva (Isaías 5:20).
  • Actuar como si la persona no hubiera cometido la ofensa.
    • Dios le perdonó al rey David sus graves pecados, pero no lo libró de las consecuencias. Además, Dios hizo que los pecados de David se pusieran por escrito para que se conocieran en la actualidad (2 Samuel 12:9-13).
  • Dejar que los demás se aprovechen de uno.
    • Supongamos que le prestamos dinero a alguien. Pero él lo malgasta, así que no puede devolverlo como se había comprometido a hacer. Él se siente mal y nos pide perdón. Nosotros podríamos decidir perdonarlo, es decir, no guardarle resentimiento ni echarle en cara continuamente lo que ha hecho. Quizás hasta pudiéramos cancelarle la deuda por completo. Sin embargo, eso no significa que tenemos que estar dispuestos a prestarle más dinero en el futuro (Salmo 37:21;Proverbios 14:15; 22:3; Gálatas 6:7).
  • Disculpar sin una base válida.
    • Dios no perdona a los que cometen un pecado a propósito y con malicia, se niegan a reconocer su falta, no quieren rectificar lo que han hecho o no están dispuestos a pedir perdón a quienes causaron daño (Proverbios 28:13; Hechos 26:20;Hebreos 10:26). Estas personas que no se arrepienten se convierten en enemigos de Dios. Y él no espera que perdonemos a los que él mismo no ha perdonado (Salmo 139:21, 22).
  • Pero ¿qué ocurre si alguien nos trata de forma cruel y se niega a disculparse o ni siquiera reconoce su error?
    • La Biblia dice: “¡Ya no sigas enojado! ¡Deja a un lado tu ira!” (Salmo 37:8, Nueva Traducción Viviente). Aunque no aprobemos lo que nos hayan hecho, no permitamos que  nos consuma la ira. Más bien, tengamos confianza en que Dios hará que se haga justicia (Hebreos 10:30, 31). Además, nos consuela saber que él pronto hará posible que desaparezcan por completo las heridas emocionales que ahora nos causan tanto dolor (Isaías 65:17; Revelación [Apocalipsis] 21:4).
  • “Perdonar” todo lo que nos haya parecido una ofensa.
    • A veces, en vez de tener que perdonar un supuesto desprecio, lo que en realidad necesitamos es reconocer que no tenemos ninguna razón válida para estar ofendidos. La Biblia menciona: “No te des prisa en tu espíritu a sentirte ofendido, porque el ofenderse es lo que descansa en el seno de los estúpidos” (Eclesiastés 7:9).

Qué nos puede ayudar a perdonar:

  1. Recordar qué implica el perdón.
    1. No significa que consideramos que está bien lo que sucedió ni que nunca pasó. Sencillamente lo pasamos por alto.
  2. Pensemos en los beneficios de perdonar.
    1. Dejar de sentirnos enojados o de guardar rencor nos ayudará a estar más calmados, mejorará nuestra salud y nos permitirá ser más felices (Proverbios 14:30; Mateo 5:9). Y, lo que es más importante, perdonar a los demás es imprescindible para que Dios perdone nuestros pecados (Mateo 6:14, 15).
  3. Seamos comprensivos. Todos somos imperfectos (Santiago 3:2).
    1. Puesto que deseamos que los demás perdonen nuestros errores, nosotros también debemos perdonar los suyos (Mateo 7:12).
  4. Seamos razonables.
    1. Si el error es de poca importancia, tenemos que poner en práctica el siguiente consejo de la Biblia: “Continúen soportándose unos a otros” (Colosenses 3:13).
  5. Actuemos de inmediato.
    1. Esforcémonos por perdonar enseguida en vez de dejar que se intensifique la ira (Efesios 4:26, 27).
La Importancia de Perdonar
Pedro le preguntó una vez al Señor cuántas veces tenía que perdonar a su hermano que pecara contra él. Entonces proveyó una respuesta posible a su propia pregunta. Dijo: ¿hasta 70 veces 7...
A partir de esto el Señor dio una respuesta concisa; luego elaboró en detalle la importancia de perdonar a quienes pecan contra nosotros.
Como en otras áreas, la enseñanza de Jesús sobre este tema particular ha sido no pocas veces retorcida y modificada para calmar a la gente que tiene comezón de oír lo que quiere oir.
En el Amor del Señor, te invito a que no te dejes engañar por nadie acerca de la importancia de perdonar a otros quienes pecan contra ti.
En Mateo 6:14,15 el Señor enfáticamente declaró una verdad eternamente obligatoria con las siguientes palabras :
“14 Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; 15 mas si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas.”
Aquellas palabras acerca de perdonar a otros que pecan contra nosotros deben de haber conmocionado a los discípulos del Señor, pues esta es la primera vez en la Biblia que tal cosa es establecida. Nunca leemos de perdonar a otros para que nuestros pecados sean perdonados, en ninguna parte de todo el Antiguo Testamento.
¡Sin embargo, el Señor cambió todo eso cuando nos dio su enseñanza sobre este tema!
¡Por favor, note que los versículos 14 y 15 son dados específicamente a aquellos ya salvados!
Esto es evidente, pues Jesús dijo vuestro Padre celestial (v. 14) y vuestro Padre (v. 15).
Compare con Mateo 18:35. Jesús nunca afirmó que los no salvos tenían a Dios Todopoderoso como su padre espiritual.
El padre espiritual de ellos es claramente el diablo (Juan 8:42-44) y ellos son claramente hijos del diablo (1 Juan 3:10).
¡Además, el diablo no puede perdonar nuestros pecados; sólo Dios Todopoderoso puede, pero solamente si cumplimos la condición de perdonar a otros!
Este hecho acerca de las dos familias espirituales nos ayuda a ver que la enseñanza del Señor sobre el tema de perdonar a otros que pecan contra nosotros está específicamente dirigido hacia aquellos que ya han experimentado una verdadera regeneración (o salvación).
La enseñanza de perdonar a otros, de modo que el Padre celestial nos perdone, está siempre dirigida hacia quienes ya son verdaderamente salvos.  
Si los pecados futuros de uno fueran automáticamente (incondicionalmente) perdonados, entonces no deberíamos tener que perdonar a otros, quienes pecan contra nosotros, para obtener el perdón de nuestros pecados, como Jesús claramente enseñó!
En Mateo 18:21-35 tenemos la más exhaustiva enseñanza de la Biblia sobre este tema de perdonar a otros que pecan contra nosotros. En esos quince versículos, se observan muchas cosas a medida que uno medita en ellos.
Algunas observaciones son:
(1) Jesús nunca sugirió siquiera que en este mundo no se pecaría contra algunos de sus discípulos.
Sin excepción, se ha pecado contra todos los que viven hoy múltiples veces, aunque sean salvos.
¡Además, si continúa viviendo por mucho más, pronto se pecará de nuevo contra usted! Esta era está desenfrenada con tal clase de cosas. No hay modo de evitar ser maltratado por otros, si uno está cerca de la gente. Se pecó injustamente contra muchas personas piadosas:
  • José por sus propios hermanos, la esposa de Potifar y el copero principal (Génesis 37-50);
  • Moisés por sus propios hermano y hermana (Números 12:1-13); y
  • David por el rey Saúl quien personalmente trató de matarlo más de una vez (1 Samuel 18:11; 19:10).
(2) En el momento de nuestra salvación, nuestra inmensa deuda de pecado que fue perdonada es asemejada a diez mil talentos. Cuando alguien peca contra nosotros, esto es asemejado a solamente cien denarios.
(3) ¡El hombre que recibió un perdón personal en Mateo 18:21-35, pero se rehusó a perdonar al hombre que le debía sólo cien denarios fue llamado un siervo malvado! Esta misma descripción es usada en Mateo 25:26 y allí aprendemos que tal gente será arrojada a la oscuridad donde habrá llanto y rechinar de dientes (Mateo 25:30).
Limitar un corazón no perdonador a un bloqueo del compañerismo es, obviamente, subestimar grandemente las consecuencias de la falta de perdón.
Ahora déjeme continuar y decir que si una persona se torna un cristiano, y luego más tarde hay una situación en donde hay un corazón no perdonador de parte del cristiano, tenemos aún que darnos cuenta de que la Escritura dice que no hay condenación para quienes están en Cristo Jesús.
Veamos una explicación de Romanos 8:1-2
“1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. 2 Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte.”
(4) De Mateo 18 ¡El mismo modo en que aquel siervo malvado fue tratado es como el Padre celestial le tratará a usted a menos que perdone de corazón a su hermano, versículo 35! Así que, ¿cómo fue tratado? El versículo 34 dice:
“Y enfurecido su señor, lo entregó a los verdugos hasta que pagara todo lo que debía.” (Biblia de las Américas).
¡Increíblemente, él fue de nuevo hecho responsable de pagar su deuda previamente cancelada! En otras palabras, bajo esas circunstancias, sus pecados pasados perdonados en el punto de su salvación inicial le fueron puestos de nuevo a su cargo.
Dios espera, incluso exige, de aquellos que han recibido una increíble misericordia de Él, la cual llegó hasta salvarlos, que en adelante muestren misericordia perdonando a otros.
Cómo detesta el diablo la luz que resplandece desde la palabra de Dios. Esto es así porque él desea condenar a tantos como pueda mediante el engaño, pero la palabra de Dios es un obstáculo fundamental.
Con esto en mente, debiera ser evidente por qué usted raramente, si alguna vez, ha oído estas simples verdades con respecto a la importancia de perdonar a otros, como se cita en estos claros pasajes.
Relaciones que Restaurar

De principio a fin, la Biblia es un libro acerca de las relaciones :

¿Cómo pueden ser restauradas y revitalizadas.?

No hay nada que caracterice más nuestra era moderna que el deterioro y la ruptura de las relaciones interpersonales.
Por cierto que el resquebrajamiento inicial se originó poco después de la creación de la vida humana.
Adán y Eva se alejaron de Dios, su primogénito mató a su hermano, y semejantes despropósitos han continuado hasta nuestra época.
Jonathan Sacks, rabino principal de Inglaterra, describe el estado general de nuestras relaciones.
“En la actualidad muchas partes [del mundo] están agobiadas por el vandalismo, crímenes violentos y falta de civismo; por el desmoronamiento de la familia y el abandono endémico de los hijos; por el deterioro de la confianza y la carencia general de fe en el poder de los gobiernos para remediar algunos de nuestros males más arraigados; y por un sentimiento generalizado de que los asuntos cruciales para nuestro bienestar futuro se están quedando fuera de nuestro control”.
Ya no confiamos en nadie.
Las relaciones interpersonales no son tan permanentes como antes. Los matrimonios de toda una vida han dejado de ser la norma aceptada. Tampoco las profesiones o empleos son tan duraderos como solían ser. No hace mucho tiempo se podía esperar que una persona trabajara para una corporación por 40 años y después se jubilara con una pensión de la compañía y posiblemente un reloj de oro.
En cambio ahora la gente joven puede contar con que tendrá que aprender varios oficios durante su vida (con los consecuentes rompimientos de relaciones) tan sólo para sobrevivir económicamente.
El diagnóstico es sencillo. Las relaciones que funcionan y duran se basan en normas comunes. Cuando las normas se tornan vagas y la gente no puede ponerse de acuerdo en aceptar y adherirse a los mismos principios, la sociedad empieza a desmoronarse. Los seres humanos tienen que ponerse de acuerdo en seguir ciertos principios; de otra manera, continuaremos experimentando el caos en nuestras relaciones interpersonales.
La Biblia es el libro por excelencia que trata acerca de las relaciones. En ella se hace hincapié en la relación más importante que podemos tener como seres humanos: ¡la relación con Dios mismo! También nos muestra cómo la reconciliación con Dios conduce a una restauración de nuestras relaciones con nuestros semejantes: cónyuges, amigos, compañeros de iglesia o compañeros de trabajo.

¿Cuál es la naturaleza de la relación de Dios con su Hijo Jesucristo?

“El Padre ama al Hijo, y todas las cosas ha entregado en su mano . . . Porque el Padre ama al Hijo, y le muestra todas las cosas que él hace . . .” (Juan 3:35; 5:20).
Muchos otros pasajes de la Escritura muestran que la relación que ellos tienen es una relación de amor, armonía, colaboración e interés altruista. ¡La suya es una relación perfecta!

¿Ofrecen el Padre y Cristo compartir su propio amor divino con los hombres y mujeres hechos a imagen de Dios?

“El que tiene mis mandamientos, y los guarda, ése es el que me ama; y el que me ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me manifestaré él” (Juan 14:21).
Dios el Padre y su Hijo Jesucristo otorgan su amor tanto a hombres como a mujeres.
Pero notemos que su amor está basado en que nos apeguemos a los principios y normas eternos que se originaron con el Padre.
“El que no me ama, no guarda mis palabras; y la palabra que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió” (Juan 14:24; ver también 1 Juan 4:16-19; Juan 17:22-26).
El Padre y el Hijo están plenamente de acuerdo en las leyes por las que gobiernan a la humanidad. Esas leyes muestran el camino del amor de Dios y fueron dadas para el beneficio de la humanidad (1 Juan 5:3; 2 Juan 6; Deuteronomio 5:33).
Quienes se oponen a esas leyes de amor acarrean sufrimiento y miseria incalculables sobre sí mismos y sobre otros. A menudo estas consecuencias se manifiestan en forma de relaciones humanas disfuncionales o completamente deterioradas.

¿Qué más se les ofrece, tanto ahora como para siempre, a los que están dispuestos a seguir las normas y los principios espirituales de Jesucristo y de Dios?

“El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada con él” (Juan 14:23).
“A todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios” (Juan 1:12).
“. . . la piedad para todo aprovecha, pues tiene promesa de esta vida presente, y de la venidera” (1 Timoteo 4:8).
La salvación se ofrece gratuitamente a los que son llamados ahora y están dispuestos a arrepentirse de sus pecados pasados y volverse en obediencia al Padre (ver Hechos 2:37-39).
Notemos que los requisitos bíblicos para recibir el Espíritu Santo son :
  • Arrepentimiento
  • Bautismo en agua  
  • Imposición de manos
Tener el Espíritu de Dios es esencial para la salvación (ver Tito 3:4-7).

¿Deben reflejar nuestras relaciones la armonía que existe entre el Padre y el Hijo?

“Nosotros tenemos este mandamiento de él: El que ama a Dios, ame también a su hermano” (1 Juan 4:21).
“En esto conocemos que amamos a los hijos de Dios, cuando amamos a Dios, y guardamos sus mandamientos” (1 Juan 5:2).
Los principios eternos que provienen del trono mismo de Dios gobiernan y definen el amor (1 Juan 2:3-7).
La única forma de resolver verdaderamente el problema de las relaciones disfuncionales es arrepentirse y empezar a guardar —tanto en la letra como en el espíritu— los Diez Mandamientos de Dios, los cuales definen el amor verdadero hacia Dios y hacia el prójimo (ver Santiago 2:8-12; Romanos 13:8-10; 1 Juan 3:10-11).
Una relación correcta con Dios y con el prójimo nos conducirá a un entendimiento más claro y profundo del propósito de la vida.
Conclusión
Amados en Cristo, recordemos de contínuo estos 3 diseños y Dimensiones que nos llevarán a Vivir en el Amor Sobrenatural de Dios :
  1. Cerrar Ciclos por medio de la Madurez Espiritual
  2. Perdonar al prójimo
  3. Restaurar y Renovar nuestra Relaciones personales
Así es que dará inicio un Nuevo tiempo, Nuevas Esferas de Influencia, Dimensiones y Medidas.
¡Dios los Bendice!

Pastor Jorge Macías Benítez